"De capa caída. Es la segunda vez que comemos desde que está el nuevo equipo y la verdad que es una pena que este restaurante se eche a perder. La primera vez los entrantes fríos, como las virutas o la ensaladilla nos los trajeron calientes. El atún del tataki tenía un color como grisáceo que devolvimos. Esta vez le tocó a las papas arrugás, las cuales estaban bastante secas como si llevaran tiempo ya hechas (aunque el mojo estaba espectacular) Los segundos fue la auténtica decepción. La primera vez pedimos un chuletón que estaba caliente por fuera pero helado por dentro (nos gustan poco hecho pero tampoco de nevera) Esta vez pedimos un arroz del senyoret el cual traía más mejillones que en toda Galicia junta y se quedó como a “medio hacer” con un poco de caldo en la base, resultando una textura gomosa y, al no concentrarse el caldo, bastante sosa. Lo mejor de la carta, tras probar varias carnes y pescados, es sin duda el cachopo, por el cuál si repetiría (no sabemos si es casero pero está muy bien hecho y presentado) De postre tienen en la carta 5 o 6 de los cuales no les quedaba ninguno salvo bolas de helado. Esperamos que esta opinión sirva de ayuda ya que nos gusta mucho el lugar. Si nos enteramos de mejoría sin duda volveremos a intentarlo. PROS: El lugar para ir con críos es espectacular y tiene muy buenas vistas. CONTRAS: La cocina parece algo típico más del Sur para turista."
