The Irish Parrot Tavern

Espectacular las hamburguesas y los sándwich, y a buen precio y las camareras encantadoras.

Sitio perfecto para tardeo, cenar... etc las camareras super atentas y amables, muy recomendable

El lugar tranquilo y agradable y la comida buena y en cantidad y el servicio muy bueno y muy agadables

Si te gusta comer abundante y rico, este es tu sitio Yo siempre pido el sándwich de pollo y es una pasada Mucha cantidad, rico y a buen precio

Un local curioso con unas comidas tamaño XXL.Con un buen precio y sobre todo riquísimas. Recomiendo ir con hambre , que aunque te den la opción del Tupperware no hay nada como recién hecha la comida.

Pedimos un par de hamburguesas...una vegana y la gallega...las dos riquísimas..y enormes...con media de patatas..todo hecho en el momento..que es de agradecer.. El ambiente estupendo con música pop en español...nos atendieron estupendamente....seguro que repetiremos ...

Fuimos 4 parejas con 7 niños, reservamos previamente. Cenamos hamburguesas, Sandwiches y raciones varias, comida abundante y rica. Tiene una plaza para que los críos corran y jueguen sin molestar. L@s camarer@s muy agradables y atent@s. Bebidas y comidas nos salió por unos 50€ por pareja. Recomendable.

Sólo fuimos a tomar unas cervezas en la terraza, por lo que no puedo opinar del tema comidas, aunque sí vi salir raciones para unos chicos y eran abundantes. Volviendo a las cervezas, nos atendieron muy bien, gente joven, nos pusieron aperitivo y lo más importante: Íbamos con nuestra perra y, sin decirles nada, sacaron una especie de cubito con agua para que el animal pudiese beber. Y lo mismo hicieron en otra mesa en la que también llevaban un perrito. Por lo tanto, terraza agradable, buena atención, cervezas fresquitas y con aperitivo y además, buen trato con las mascotas. Volveremos.

Sitio Bueno, Bonito y Barato. Era la primera vez que íbamos y sin duda volveremos. Éramos 3 personas, pedimos media ración de rancheras al centro y de platos individuales pedimos una hamburguesa Irish Parrot, una hamburguesa Berlín y una tosta de queso brie y mermelada de frambuesa. Estaba todo delicioso (ya se ve en las fotos la pintaza que tiene), las raciones eran bien grandes, hasta el punto de habernos tenido que llevar a casa media Irish Parrot en un tupper. El servicio es intachable, personal súper cercano y atento, un ambiente muy familiar, parada obligatoria en Griñón. Y por cierto precio insuperable y no le envidia nada en calidad a las hamburgueserías caras de Madrid ciudad.